Hay amores que a una le hacen volar y soñar con las nubes. ¿A vosotras no os pasa? Como los que os quiero enseñar hoy, que te dan alas para verlo todo mejor desde las alturas y que te hacen gritar a lo Frida Kahlo: “pies, ¿para que los quiero? ¡Si tengo alas para volar!”.
Maledetti Toscani: amor a fuego lento
Hay amores fugaces… Y amores a fuego lento. Esos son los que a mi me gustan: los que se se cocinan poquito a poco. Con los zapatos pasa lo mismo. Los hay “low cost”, o también llamados “fast food”. O mejor digámosle “fast foot”. Sí, sí, así con “t”. De “Foot” en inglés y “pie” en español.
Pisaverde: calzado canario hecho a mano
Una semana más estoy de vuelta para contaros mis andanzas y taconeos. Ya sabéis que estos últimos no pueden faltar nunca. Esta semana quiero compartir con vosotros un descubrimiento. El caso es que estas navidades, me fui unos días de vacaciones por territorio canario. Me dirigía a la isla de La Palma, pero para llegar a ella tuve que hacer escala en Tenerife. Muy digna yo, me puse unos botines de tacón y cogí mi bolso más lujoso y me subí al avión. Ya os podéis imaginar a mi chico diciéndome que donde iba así, si total, íbamos a pasar las vacaciones haciendo trekkings. ¡Antes muerta que sencilla! ¡Qué tiempo para deportivas había de sobra! Una urbanita como yo (así me llama), ¡no podía subirse al avión en zapatillas deportivas y con una mochila! ¡Hombres, no nos comprenden!