A kurt Geiger tuve el placer de conocerlo por primera vez cuando vivía en Irlanda, hace unos añitos ya. Fue amor a primera vista. Entré en el “Shoe Garden” de Dublín, una mítica tienda de calzado de la cual ya os he hablado en alguna ocasión en Instagram. Es como el paraíso de cualquier adicta a los tacones como yo, con la única diferencia que en lugar de residir en el cielo, lo podréis encontrar a pie de calle, exactamente en Henry Street.
Cruce la puerta, con tacones puestos, por supuesto. Allí estaban: unas sandalias del 38 en color naranja y negro de la colección Carvela, con un tacón de 12 centímetros, que hacían temblar de emoción a cualquiera. Y así fue como Kurt Geiger me cautivó para siempre. A partir de ahí, la historia ya la podéis imaginar. No he podido de dejar de ser fiel a sus diseños.
Esta vez, los culpables de mis desvelos son estos stilettos negros y plata con ese cruce de tiras tan especial. Que me parece que quedan sensacionales con cualquier vestido negro, granate, violeta… ¿O porque no?, de rayas. El negro y el plata, se podría decir, que aceptan casi todos los colores. Este vestido es de River Island, comprado hace cosa de un mes en Cork – también Irlanda -, mi segunda casa. Una ciudad que nunca me canso de visitar y que me trae tantos maravillosos recuerdos de mi época allí.

En la isla esmeralda no sólo conocí a kurt Geiger, también a River Island. También descubrí que las sandalias valen tanto en agosto como en diciembre – allí se las ponen todo el año. Que da igual si chispea, si diluvia, o si caen gatos y perros del cielo -it’s raining cats and dogs-, como dicen ellos cuando llueve a mares. Que da igual si el zapato te hace daño, que se vuelve a casa descalzo. Ya sabéis cómo se las gastan en otros países con lo de ir caminando sin zapatos por la vida. Y yo que soy muy exquisita, antes muerta que sin mis tacones.
Más tarde, también descubrí que las chicas de Cork llevan stilettos de Christian Louboutin. Entre tú y yo, ¡de imitación! Comprados todos en una tienda de la ciudad, escondida en uno de los callejones que desembocan en Saint Patricks Street. Que no os creáis que eran baratos por ser una copia. A 150€ el par de suelas rojas.
Y ahora ya es hora de aterrizar de nuevo en España, qué me pongo a divagar y os desvío de trayecto. Si os gusta el vestido o los zapatos, tengo una buena noticia: ¡No hace falta ni ir a Cork , ni cruzar el charco! Ambas firmas tienen tienda online y hacen envíos a España. Espero que os haya gustado el outfit y el paseo. ¡Y hasta la próxima! Aquí os espero.
Detalles del outfit:
Vestido: River Island
Bolso: Guess
Zapatos: Kurt Geiger.